Crítica de "El sentido de un final" de Julian Barnes

Portada del libro El sentido de un final de Julian Barnes
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Novela del escritor Julian Barnes 
¿Cómo empieza?
"Recuerdo, sin un orden concreto:
- la reluciente cara interior de una muñeca;
- el vapor que sube de un fregadero mojado cuando jocosamente se introduce en él una sartén caliente;
- gotas de esperma alrededor de un desagüe, antes de que las engullan las largas tuberías de la casa;
- un río que fluye absurdamente cauce arriba y los rayos de media docena de linternas que los persiguen e iluminan su chapoteo y sus ondas;
- otro río, ancho y gris, y el viento recio que agita su superficie y encubre la dirección de su flujo;
- agua de bañera que se ha enfriado hace mucho detrás de una puerta cerrada con llave.
Esto último no lo vi realmente, pero lo que acabas recordando no es siempre lo mismo que lo que has presenciado."

¿Qué cuenta?
La existencia de un grupo de amigos se verá marcada por un hecho trágico que tiene lugar durante su juventud. Cuarenta años después, Tony, el protagonista de la novela, recibe una carta acompañada de una misteriosa herencia. Esto le lleva a reflexionar sobre aquellos años y a indagar sobre asuntos que parecían definitivamente cerrados

El personaje
Adrian Finn, el chico inteligente, tímido, especial, que irrumpió en las vidas de Tony y su pandilla, cambiándolos para siempre:
«Juramos reunirnos los tres cada vez que tuviéramos vacaciones en la universidad y volviéramos a casa; pero no siempre era posible. Y el correo parecía haber replanteado la dinámica de nuestra relación. Los tres del grupo original nos escribíamos con menor frecuencia y menos entusiasmo de lo que escribíamos a Adrian. Buscábamos su atención, su aprobación; le cortejábamos y era el primero al que contábamos nuestras mejores vivencias; los tres pensábamos que éramos, y merecíamos ser, su amigo más íntimo. Y aunque hacíamos nuevas amistades, de algún modo estábamos convencidos de que no era el caso de Adrian, de que los tres seguíamos siendo sus camaradas más próximos y de que dependía de nosotros.»

El fragmento
"Cuando la gente dice «Es una mujer atractiva», normalmente quieren decir «Era una mujer atractiva.» Pero cuando yo lo digo de Margaret lo digo en serio. Ella cree -sabe- que ha cambiado, y así es; aunque para mí menos que para todos los demás. Naturalmente, no puedo hablar por el director del restaurante. Pero yo lo expresaría así: ella sólo ve lo que ha desaparecido, yo sólo veo lo que permanece. El pelo ya no le llega hasta la mitad de la espalda ni lo lleva recogido en un moño vertical; hoy lo lleva a ras del cráneo y le asoman las canas. Ha reemplazado por rebecas y pantalones de buen corte los vestidos rústicos que solía ponerse. Algunas de las pecas que amé en otros tiempos están ahora más cerca de ser manchas biliares. Pero lo que seguimos mirando son los ojos, ¿no?" (pp 96-97)



¿Por qué tienes que leerlo?
Porque los libros de Barnes rezuman maestría: El sentido de un final es una novela profunda, con una trama compleja que el autor británico logra hilar con brillantez.
Porque Julian Barnes ha logrado una buena novela (ganadora del prestigioso Man Booker en 2011), una historia emotiva, reflexiva e intensa que, por ponerle un pero, adolece de un final demasiado efectista. 

Alguna curiosidad para acabar
Según confesó al diario El Mundo, la novela surgió de las numerosas conversaciones que el autor mantuvo con su hermano, el filósofo Jonathan Barnes.

Título: El sentido de un final
Título originalThe Sense of An Ending
Editorial: Anagrama (Panorama de Narrativas)
Traductor:  Jaime Zulaika
Año original: 2011
Páginas: 192
ISBN: 978-84-339-7852-3

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